
Avril Lavigne es el quinto álbum de estudio homónimo de la artista canadiense, lanzado en noviembre de 2013. En este disco Lavigne retoma una apuesta más enérgica y pop frente a su álbum anterior Goodbye Lullaby, incorporando elementos de pop-rock, música electrónica, industrial y punk. El álbum incluye colaboraciones vocales destacadas: un dueto con Chad Kroeger (Let Me Go) y una aparición de Marilyn Manson (Bad Girl). Entre sus sencillos más representativos figuran Here’s to Never Growing Up, Rock N Roll y Hello Kitty. Las letras del álbum mezclan temas de celebración juvenil, nostalgia, intensas pasiones y reflexión personal, entregando una paleta que va desde canciones veraniegas hasta baladas introspectivas.