Las hermanas colombianas Elia y Elizabeth Fleta grabaron un puñado de canciones entre 1972 y 1973, acompañadas por Jimmy Salcedo y su grupo La Onda Tres, mezclando soft-pop con un toque de funk tropical-pastoral, canción de autor endulzada por el sutil perfume musical del Caribe y por psicodelia.
Estos elementos se mezclaron con gracia, rebosantes de frescura, en una combinación idónea entre melodías perfectas con letras inspiradas en una genuina curiosidad juvenil sobre los misterios de la vida, el amor y la naturaleza en sus formas más simples.