Hard Hands es un álbum clásico del percusionista Ray Barretto, lanzado en 1968. Este disco es un testimonio del impacto de Barretto en la escena de la música latina, fusionando ritmos afrocubanos con jazz y otros elementos del soul, funk y boogaloo, estilos que estaban en plena efervescencia en la Nueva York de finales de los 60.
El álbum abre con la canción que le da título, Hard Hands, una pieza vibrante y dinámica que destaca el virtuosismo de Barretto en las congas. Con una energía cruda y una percusión intensa, esta canción es una verdadera carta de presentación para el músico, que muestra sus "manos duras" como maestro de la percusión.
A lo largo del álbum, Barretto y su orquesta combinan una mezcla perfecta de ritmos bailables, melodías pegajosas y complejas improvisaciones instrumentales. Temas como Abidjan, con sus toques afrojazz, y Love Beads, con una fusión de soul y boogaloo, demuestran la versatilidad de la banda y la capacidad de Barretto para mover con igual destreza a los fanáticos de la salsa y a los amantes del jazz.
Hard Hands es considerado uno de los mejores álbumes de Ray Barretto, no solo por su calidad musical sino también por su influencia en el desarrollo de la salsa y la música latina en general. Su capacidad para innovar y cruzar fronteras de géneros lo convierte en un álbum esencial para quienes buscan comprender la evolución de la música latina en el siglo XX.